lunes, 5 de noviembre de 2012

Ante todo "Información"


La gestación, el nacimiento, son los hechos más importantes en la vida de las personas, tanto  para el bebé, como para las madres y padres. En las últimas décadas se ha tecnificado tanto la gestación y el nacimiento que se ha perdido en gran medida la oportunidad de experimentarlo con toda su carga emocional, con toda su fuerza vital.

Toda mujer tiene el derecho (y yo diría además el deber) de informarse de las diferentes posibilidades que tiene de vivir el embarazo, como de traer a sus hij@s al mundo, de lo que supone cada una de ellas, teniendo en cuenta sus propias necesidades y las del bebé; escogiendo la que crea más adecuada a sus expectativas y deseos. Para ello no hay más remedio muchas veces que “buscar” esa información fuera de los cauces hospitalarios y médicos usuales, tarea a la que estamos  dedicados; informando, asesorando y protegiendo los derechos de madres y bebés (incluyendo lo relacionado con apoyo a la lactancia y a la crianza con apego).

“El nacimiento es un acto sagrado, una representación en la Tierra de la Creación de la vida. Dar a Luz es un acto sublime de amor, lleno de afecto y entrega. Toda madre, todo bebé, tiene derecho a vivirlo en toda su intensidad, con toda su carga emocional. Respetando el nacimiento, respetamos al Ser Humano, respetamos la Vida y sembramos semillas para un mundo mejor.”

Nuestro programa es Dirigido a  Futuras madres y padres, primerizos o no; y a cualquier otro miembro de la familia que desee participar.
Nuestro objetivo se fundamenta en la sensibilización, orientación de los futuros padres sobre todos aquellos aspectos que forman parte del embarazo, parto, post parto, lactancia y cuidados del recién nacido para:
  • ·       Lograr una conciencia gestacional.
  • ·       Favorecer la vinculación con el bebé intrauterino.
  • ·       Lograr una participación activa durante el parto.
  • ·       Concientizar que la lactancia materna es el método ideal para la alimentación del bebé.
  • ·       Favorecer el vínculo emocional padres-hijo de una manera consciente y responsable.

La educación prenatal, se ofrece como el enfoque y la metodología puesta en práctica por “CRECIENDO JUNTOS” como institución dedicada a la familia en gestación.

Para “CRECIENDO JUNTOS”, la educación prenatal tiene un enfoque integral, ya que incluye el embarazo, el parto/nacimiento y el postparto, es decir: el proceso de gestación, el nacimiento y el período posterior, en el que bebé se va a casa con sus padres.

Nuestra propuesta se centra en la vivencia de un parto armónico, en el que no se excluye el dolor, porque éste puede llegar a formar parte de esa experiencia fisiológica, pero sin connotaciones de sufrimiento.

Y más aún, a través de la educación prenatal, además de la preparación para el parto normal se consideran otras opciones por las que puede nacer un bebé; tomando en cuenta la cesárea como un recurso que se puede llegar a lograr de una manera sensible y humanizada, considerando también alternativas naturares del nacimiento como el parto en agua y el parto vertical.

Fabricando amor



Cuando los padres estén informados de que su hijo se educa al mismo tiempo que se forma, tendrán mayores posibilidades de evitar que reciba ciertas violencias y podrán darle las mejores condiciones para su desarrollo más óptimo, según su propia dinámica y su proceso natural.
El bebé en el útero vive y convive intensamente con su madre 24 horas al día durante más de 9 meses. Él no tiene la posibilidad de hacer una selección entre lo que le beneficia y lo que le resulta nocivo. Es la futura madre la que debe hacer esa elección, con la complicidad del padre y de los profesionales que la acompañan.
Todo ello invita a los futuros padres y sobre todo a la futura madre, primera y principal educadora de su hijo/a, a transmitirle lo mejor de sí misma y a utilizar el poder de su imaginación creadora para sembrar en su bebé la alegría, la tolerancia, la paz, el amor, el entusiasmo, el respeto... es decir, sensibilizarlo a los más bellos valores del ser humano. Y esos valores, penetrarán tan profundamente en el subconsciente de su hijo, que le influirán a lo largo de su vida. Si antes  de nacer le expresas tu amor incondicional, se sentirá seguro y contento de venir al mundo. Por eso, dile cuánto lo quieres.
Tu niño te necesita para crecer y desarrollarse, pero también depende de ti para construir su “yo” emocional.
Para ser madre, en el profundo sentido de la palabra, no tienes que esperar a que nazca tu bebé. La maternidad no consiste en tener “físicamente” un hijo, sino en amarlo con entrega, sin condiciones. Por eso, se puede decir que empiezas a ser madre cuando decides tener un bebé, porque le has deseado y amado incluso antes de que fuera una realidad.